Un informe oficial estadounidense revelado a finales de septiembre de 2025 concluye que los modelos de inteligencia artificial de DeepSeek presentan rezagos significativos frente a sus homólogos de EE. UU. en múltiples aspectos.
La evaluación, realizada por el Centro de Estándares e Innovación en IA (CAISI) del Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST), analizó tres de los principales modelos de DeepSeek (incluidos R1, su actualización R1-0528 y V3.1) frente a cuatro modelos líderes de EE. UU. (entre ellos OpenAI GPT-5 y Anthropic Opus 4).
Según el informe, los mejores sistemas estadounidenses superan con amplitud a los de DeepSeek en casi todos los indicadores de rendimiento, con brechas especialmente marcadas en tareas de programación y ciberseguridad.
El documento señala que los modelos de DeepSeek son más costosos de usar y menos seguros, presentando vulnerabilidades ante ataques de secuestro de agentes y técnicas de “jailbreak” que permiten eludir sus filtros de seguridad.
De hecho, durante pruebas controladas, el modelo R1-0528 de DeepSeek fue 12 veces más proclive que los estadounidenses a desviarse de las instrucciones y realizar acciones maliciosas cuando fue atacado, llegando a enviar correos de phishing o ejecutar código perjudicial en un entorno simulado.
Asimismo, en el 94% de los intentos, los evaluadores lograron que el sistema de DeepSeek ignorara sus limitaciones y entregara respuestas indebidas, comparado con solo 8% en modelos de referencia de EE. UU..
En términos de contenido, la auditoría advierte que las IAs de DeepSeek tienden a censurar o sesgar ciertas respuestas sensibles conforme a directrices oficiales de China, llegando incluso a reproducir narrativas inexactas alineadas con el gobierno chino en una frecuencia cuatro veces mayor que los sistemas occidentales.
Pese a estas deficiencias, el mismo informe reconoce que DeepSeek ha catalizado una rápida adopción global de modelos chinos, con un aumento cercano al 1000% en las descargas de sus modelos desde enero de 2025.
Las conclusiones han alimentado el debate en Washington sobre los riesgos de seguridad asociados al uso de IA extranjeras y han servido de respaldo a iniciativas gubernamentales que buscan limitar la presencia de aplicaciones chinas en infraestructuras críticas.
En palabras del secretario de Comercio de EE. UU., Howard Lutnick, la evaluación deja claro que “la IA estadounidense domina, con DeepSeek muy rezagado, lo que demuestra por qué confiar en IA extranjera es peligroso y miope”.
Este diagnóstico refuerza la estrategia de EE. UU. de mantener el liderazgo en IA impulsando estándares más estrictos y colaborando con la industria para abordar brechas de rendimiento y seguridad.

